Ediciones En Huida y la Carbonería
quieren invitarte a la presentación
y lectura del poemario
Los hilos esparcidos sobre la tierra
de
Inma de Pando
El viernes 2 de marzo de 2012,
a las 20:30 horas.
a las 20:30 horas.
Los hilos esparcidos sobre la tierra, de Inma de Pando.
Obra que se materializa en una íntima ofrenda a la memoria. No como alabanza que secunda la creencia o el signo de desasosiego ante la fatalidad. Sí como certera evocación e invocación de un tiempo que, pese a todo, continúa hablando de futuro. El eco de los que fueron no desiste en saberse nombrado, y la autora, desde una personal y franca expresión, lo asume como una herida, pero también como luz de revelación “Como un latido fuerte y ronco, pienso en el olvido. / Me han precedido seres que lo perdieron todo. / Que lucharon por el futuro que ahora habito. / Extenuadas sombras vivas, duros corazones, / pechos doloridos y conscientes.” La autora se hace eco y medida de un tiempo silenciado, proscrito. Encarna el espíritu indomable y obcecado que se empeña en anudar pasado y futuro en un presente que nos requiere, aunque no sea actualidad “Apenas se como acercarme a tu tiempo/ sin convertirte en un trazo vacío, / en un puñado de lemas, / en una utopía que ansío/ y hago tuya”. Desde una convocatoria intemporal, apela al eco de los que nos precedieron. “Os convoco para preguntaros: ¿Cómo?/ Cómo unirme a vosotros. / Cómo trenzar desde mi tiempo/ los hilos esparcidos sobre la tierra”. Con un denodado tesón creativo, va conformando un caleidoscopio de miradas ceñidas a la historia con nombres propios: topos, brigadistas, Las trece rosas, El convoy de los 927, La carretera de la muerte, Standbrook, El Transahariano, El canal de los presos, Sierra de Teruel, etc. Pero también la orografía en la intrahistoria más personal: la esperanza, “Desde el futuro te contemplo fijamente./ Entregabas la vida,/entregabas la vida/ repito/ como un rosario ateo” ; el miedo, “En tu diario de niña/descubro asombrada el Miedo./ (...) Cómo puedo entregarte, mujer,/ mi amor por tu pasado”; la deuda como honra “Yo, que amanezco un día y otro,/ y respiro, y camino, y vivo,/yo,/os debo algo”; la luz, revelación del transigente y vital pecado “¿Pensabas que la luz era un bien prohibido? ”En Los hilos esparcidos sobre la tierra, la poesía se manifiesta como deflagración. Una súbita llama prende la gavilla de versos estremecidos en los que se consume su decir lirico. Es una ceremonia poética cuya liturgia prescinde de lo suplementario o maniqueo y trata con una inteligente fiereza la guerra, la represión, el exilio, la miseria durante la Guerra Civil española. No establece equidistancias. La suya es una voz comprometida que se alinea con claridad y honra con quienes fueron derrotados, perseguidos y represaliados. Sin embargo no juzga, sencillamente indaga en sí misma y en el despojo del tiempo. Reivindica la emoción como rasgo identificario de la poesía. Ésta que transita con meridiana claridad, no para hacerse notar, más bien para guarecerse y depurar su cántico. La evocación de la pérdida es una constante, la reflexión mesurada es un valor indeclinable. No hay reflejos. La mirada es directa y se detiene para contemplar su verdad y nos la hace saber.
Inma de Pando.
Licenciada en Periodismo por la Universidad de Sevilla. Ha desarrollado una amplia experiencia profesional como responsable de gabinetes de comunicación de distintas organizaciones vinculadas con la intervención en situaciones de exclusión social. Es miembro de la Asociación Cultural Apoloybacoy de la Escuela Libre de Historiadores, además de redactora-colaboradora en Andalucía del Periódico Diagonal. Además de la publicación del breve poemario Retazos, re-cuerdos (Padilla Libros, 2002), 1º Premio del IX Concurso de Poesía de C.A.S.A, ha participado en las antologías Poetas en bicicleta (Nuño Editorial, 2007) y Poéticos maullidos (Los libros de Umsaloa, 2009). También ha colaborado con obras poéticas en la Exposición colectiva de pintura de Fundación Fulmen, en marzo de 2010. “Los Hilos esparcidos sobre la tierra” es su primera publicación en solitario. Nos dice, como apunte a la creación poética: “Concibo la poesía como un acto cotidiano, una manera de respirar, comprenderse a uno mismo, sus emociones, expectativas y miedos, así como una forma de comprender el mundo, acercarlo y mantenerlo vivo a través de la palabra. En este sentido, defiendo que la poesía existe en muchas más bocas y manos de las que podemos imaginar, que nunca se llamarían a sí mismas “poetas”, pero que nos regalan, sin pretenderlo, esa capacidad de retratar el dolor o la belleza, de hacérnosla llegar como un rayo revelador, un instante de lucidez, que nos permite descansar de las corazas del día a día, y mirarnos, a solas, o con los otros, desde la desnudez de la palabra. La poesía”.
Puede contactar con la autora a través de la dirección electrónica:
inmapanderorojo@hotmail.com
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